La alta concentración de representaciones culturales de distintas épocas, constituyen la demostración manifiesta de la importante ocupación histórica del territorio. Recorrer estos enclaves patrimoniales permitirá al visitante, si así lo desea, avanzar en un viaje en el tiempo a través de los muchos y variados testimonios del suceder histórico.
De este modo podremos trazar una línea continuada desde los milenarios monumentos megalíticos, el arte rupestre sobre las piedras de Pedrouzo o los poblados castreños de épocas prehistóricas, hasta la irrupción romana y los inicios del cristianismo testificado en el lugar de Tines. De los convulsos tiempos medievales, el Castillo medieval será todo un icono de la arquitectura defensiva, pero además encontramos remembranzas del románico en iglesias como la de San Antolín de Baiñas o en Santiago de Cereixo.
No abandonaremos Cereixo si queremos descubrir un monumental molino de mareas en perfecto estado de conservación, y por proseguir con moliendas citaremos el conjunto etnográfico de Mosquetín y sus batanes, arquitecturas populares que nos hablan de la productividad de la tierra, arrendamiento bien fructífero como podremos comprobar, observando la importante presencia de pazos en la comarca, alguno tan hermoso como el que se sitúa en la propia villa de Vimianzo, el elegante Pazo de Trasariz. (foto)